En la entrada pasada escribí sobre un tipo de ayuno que pareciera encerrar uno de los componentes más importantes para la longevidad, ya que gracias a esta práctica podemos activar la autofagia, entendida como la limpieza celular o el reciclaje de las partes celulares dañadas. (leer aquí). En esta oportunidad quiero contarte sobre un protocolo de ayuno que es sumamente eficiente no solo para el rescate de nuestra tan importante salud intestinal, sino también para mantenerla. Para ello es importante presentar algunos conceptos básicos:
¿Qué es el microbioma?
Imagínate una ciudad bulliciosa en una mañana cualquiera de la semana laboral, las aceras inundadas de gente corriendo para llegar al trabajo y a sus citas. Ahora imagínate esto a nivel microscópico y tendrás una idea de cómo se ve el microbioma dentro de nuestros cuerpos, que consta de billones de microorganismos (también llamados microbiota o microbios) de miles de especies diferentes. Así describe el microbioma la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard. Estos microorganismos incluyen no sólo bacterias, sino también hongos, parásitos y virus.
En una persona sana, estos “bichos” coexisten pacíficamente, y la mayor parte se encuentra en el intestino delgado y en el intestino grueso, pero también en todo el cuerpo. El microbioma incluso se piensa como un órgano de apoyo porque desempeña muchas funciones clave en las operaciones diarias del cuerpo humano.
Cada persona tiene una red de microbiota completamente única que originalmente está determinada por el ADN de cada ser humano. Una persona se expone por primera vez a los microorganismos cuando es un bebé, durante el parto en el canal de parto y a través de la leche materna. De hecho, exactamente a qué microorganismos está expuesto el bebé depende únicamente de la especie que se encuentra en la madre. Más tarde, las exposiciones ambientales y la dieta pueden cambiar el microbioma de una persona para que sea beneficioso para la salud o lo ponga en mayor riesgo de enfermedad.
El microbioma consiste en microbios que son útiles y otros potencialmente dañinos.
La mayoría de estos microorganismos son simbióticos (en los que se benefician tanto el cuerpo humano como la microbiota) y algunos, en menor número, son patógenos (promueven enfermedades).
En un cuerpo sano, la microbiota patógena y la simbiótica conviven sin problemas. Pero si hay una alteración en ese equilibrio, provocada por enfermedades infecciosas, ciertas dietas o el uso prolongado de antibióticos u otros medicamentos que destruyen las bacterias, se produce disbiosis, lo que detiene estas interacciones normales. Como resultado, el cuerpo puede volverse más susceptible a las enfermedades.
Ayuno Para Resetear el Intestino: 24+ horas
Una vez que hayas acondicionado a tu cuerpo, el ayuno de 24 horas o más, podría ser considerado como de los más fáciles de llevar a cabo. Es un ayuno sumamente eficiente y el que pareciera tener el mayor impacto en tu microbiota intestinal.
Cuando estás en un estado de ayuno de 24 horas o más, es el tiempo suficiente para obtener una ráfaga de células madre, liberadas en tu intestino para reparar su revestimiento mucoso interno, el cual puede estar dañado o debilitado a causa de la inflamación crónica.
Lo maravilloso de este tipo de ayuno es lo rápido que actúa sobre la salud del intestino. Es durante los ayunos de 24 horas o más, que tu cuerpo comienza a producir células madres, las cuales revivirán aquellas que están debilitadas. ¿Para qué pagar grandes sumas de dinero inyectando Células Madres, cuando este ayuno tiene el mismo poder regenerativo sin tener que pagar un solo centavo?.
Aproximadamente un 90% de nuestro microbioma reside en nuestro intestino. Extender nuestros ayunos a 24 horas o más, los vigoriza! Ellos son un componente crítico de nuestro sistema inmune y asistirán a nuestros neurotransmisores, quienes son los nos mantienen felices, calmados y enfocados.
La doctora Pelz hace uso de estos ayunos de 24 horas o más para los siguientes casos:
✅ Contrarrestar el uso de antibióticos
✅ Compensar los efectos por uso de anticonceptivos
✅ Ayuda a abordar el sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado (SIBO)
Contrarrestar el uso de antibióticos:
El uso o consumo de antibióticos puede destruir hasta el 90% de las bacterias en nuestro intestino. Tanto las bacterias buenas como las malas. Con la destrucción de las bacterias malas se va la infección, pero las bacterias buenas que apoyan nuestra salud también se reducen considerablemente. Sólo un par de ayunos de 24 o más ( o al menos 1 vez a la semana durante el tratamiento, y por lo menos durante 4-5 semanas una vez culminado el tratamiento) permitirá que esas células madres se recarguen y así poder reparar el terreno deforestado en nuestro tracto intestinal, el cual ha sido afectado por el uso de antibióticos.
“La combinación de prácticas de ayunos de 24 horas con alimentos que alimentan las bacterias buenas (prebióticos) pueden revertir el daño causado por el uso de antibióticos”, señala la doctora Pelz.
Compensar los efectos por uso de anticonceptivos:
El uso de la píldora anticonceptiva destruye la diversidad de nuestro microbioma, contribuye al intestino permeable, y crea el ambiente perfecto para el crecimiento del hongo de la Candida.
El intestino permeable es una afección en la que las uniones estrechas en el revestimiento del intestino delgado se rompen, lo que permite que las toxinas, los alimentos no digeridos y los patógenos dañinos ingresen al torrente sanguíneo, lo que provoca una respuesta inflamatoria sistémica en el cuerpo. Muchas mujeres han estado usando píldoras anticonceptivas durante décadas, solo para quedarse con este terrible efecto secundario. El hecho de que dejes de tomarla no significa que el daño intestinal que causó desaparecerá. Es aquí donde un ayuno de 24 horas realmente puede ser muy eficiente y beneficioso. Cuanto más lo practiques (1-2 veces por semana no seguidos) mejor podrás reparar cualquier daño que la píldora pueda haber causado, siendo más efectivo que cualquier medicamento o suplemento.
Ayuda a abordar el sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado (SIBO):
El sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado, conocido como SIBO, es una de las enfermedades intestinales más difíciles de tratar. A diferencia del intestino grueso, el intestino delgado generalmente está libre de bacterias, por lo que cuando las bacterias comienzan a multiplicarse en él, pueden surgir problemas.
Un sello distintivo de SIBO es la hinchazón cuando comes alimentos ricos en fibra como las verduras. Son muy pocos los suplementos o medicamentos que son realmente efectivos para tratar la afección. La práctica de ayunos de 24 horas o más permitirá que tu cuerpo sane, ya que no alimentas a estas bacterias con algo que las haga crecer más; simplemente cambias el ambiente en tu intestino para restaurar su homeostasis microbiana, el estado de funcionamiento óptimo del cuerpo.
Son irrefutables los maravillosos efectos curativos y terapéuticos que los ayunos de 24 horas o más ofrece, sin embargo, y haciendo uso de mi palabra favorita ante cualquier afirmación, todo depende.
Para realizarlos en una forma efectiva y que traiga más beneficios que efectos adversos, es de suma importancia varios factores que no podemos dejar por fuera, donde la relación del practicante con la comida es la principal. De no haber establecido un acondicionamiento y entrenamiento previo, donde haya una reconciliación con la ingesta de nutrientes, se haga honor a las señales fisiológicas del cuerpo como el hambre y la saciedad y donde el ambiente hormonal de la mujer sea propicio, mi recomendación sería el dejar este tipo de ayunos para otro momento. No hay beneficio que supere esta relación que sostendrás por el resto de tu vida: La que tengas con la comida.
Siempre recuerda que el ayuno es una herramienta muy poderosa y muy eficiente! Pero no es la única.
Gaby
